Existen muchas formas de hacer que las uñas sean más largas y fuertes: uñas de gel, manicuras permanentes y, las protagonistas de este artículo, las uñas acrílicas. Te explicamos todo lo que necesitas saber sobre las uñas acrílicas y el polvo acrílico que necesitarás para hacer estas uñas.
¿Qué es y para qué sirve el polvo acrílico?
El polvo acrílico se utiliza para crear uñas artificiales acrílicas, que son extensiones colocadas sobre la uña natural para conseguir un tamaño mayor o una forma determinada deseada. No necesita curado en lámpara, ya que se seca al mezclarlo con monómero.
Para crear las extensiones acrílicas puedes utilizar tanto tips como moldes. Gracias al polvo acrílico, conseguirás proteger mejor las uñas, y también serán unas uñas más resistentes y evitarás quebraduras. Además permite reconstruir uñas dañadas o incluso rotas.
¿Cuál es la diferencia entre uñas acrílicas y uñas de gel?
Las principales diferencias entre las uñas acrílicas y las uñas de gel son:
- El acrílico se mezcla con monómero, se utiliza encima de las uñas con un molde y es de secado al aire. En cambio, las uñas de gel se secan en lámpara.
- El acrílico es un material más duro que el gel, por lo que puede ser ideal para estructuras largas o clientas con problemas de roturas.
- El gel es muy elástico y es más resistente en el caso de uñas débiles.
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Nuestros polvos acrílicos de colores sirven para conseguir distintos estilos de uñas, desde la francesa tradicional hasta el baby boomer. Este polvo acrílico súper fino tiene la característica de contar con colores especiales.
Contienen una fórmula especial antiamarillo. Al unirse con el monómero es de textura cremosa, muy flexible y autonivelante. Su fórmula hace que las uñas extendidas sean más duraderas, por lo que no se rompen ni se agrietan. Enmascaran perfectamente todas las decoloraciones en la placa de la uña natural.
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